El 30 de agosto, Netflix estrenará Residir 100 abriles: Los secretos de las Zonas azules, una miniserie documental que explora, de la mano del autor Dan Buettner, las cinco «Zonas azules» del mundo.
¿Qué son las Zonas azules? Son las cinco ciudades cuyas poblaciones viven en promedio mucho más que el resto. El quinteto lo conforman: Okinawa, Japón; Cerdeña, Italia; Icaria, Grecia; Nicoya, Costa Rica; y Montículo Linda, California. Todas comparten una dieta basada en plantas, movimiento natural y poner a la clan primero.
Según el sitio oficial de Netflix, la serie, al igual que el volumen de Buettner “The Blue Zone: 9 Lessons of Living Longer from the People Who’ve Lived the Longest”, explora la ciencia y los estilos de vida detrás de la perdurabilidad.
“La serie es la culminación de 20 abriles de identificar y estudiar a las personas más longevas del mundo”, dijo el investigador a Netflix.
Ahora aceptablemente, ¿cuáles son las características que distinguen a las Zonas azules? Repasemos una por una.
Okinawa, Japón
Japón es uno de los países con la esperanza de vida más larga del mundo. Se estima que hay más de 50 mil centenarios japoneses. Pero la isla de Okinawa, una península ubicada al sur del país, tiene el registro más detención del país. Los ancianos llegan a comportarse aproximadamente de 84 abriles y las mujeres alcanzan los 90 abriles. El peligro de enfermedades cardiovasculares, demencias seniles y Alzheimer es bajísimo en comparación con Estados Unidos, por ejemplo.
Los abuelos se mantienen activos realizando actividad física a diario, conservando las relaciones sociales de por vida y nutriéndose con alimentos propios de la isla. En primera instancia, es fundamental conocer el término Ikigai, como se denomina al propósito de vida, es sostener, el motivo o la razón para levantarse todos los días de la cama.
En segundo circunstancia, moais: un camarilla de amigos que se acompañan durante el resto de la vida, con una idea de propósito en popular. Esta tradición okinawense investigación que la persona envejezca acompañado de alguno cercano que puede cumplimentar un sostén emocional e incluso financiero. El contacto físico y el apoyo de los amigos es fundamental para el buen ampliación de la lozanía mental.
Por zaguero, el Hara Hachi Bu es el mantra que repiten ayer de yantar. Pero incluso es una dieta basada en vegetales, pescados y productos de la isla. Encima de yantar hasta un 80% de tu capacidad, es sostener, una reducción calórica autoimpuesta.
Península de Nicoya, Costa Rica
Este sector del país caribeño parece sobresalido del atlas. Los lugareños no conocen de lujos ni excentricidades, más aceptablemente de naturaleza, playas paradisíacas, frutos tropicales y trabajo duro en una zona que mayormente estuvo asilada del resto del país. Los ancianos de Nicoya tienen huesos fuertes y bajas tasas de enfermedades cardíacas. Mantienen una vida social activa, encima de trabajar mucho y realizar deporte a diario pero de herido intensidad.
En su dieta podría estar la secreto de su perdurabilidad. Muchas frutas tropicales y las llamadas “tres hermanas” de la agricultura mesoamericana: los frijoles, el maíz y la calabaza. Este ciclo agrícola posee una combinación perfecta desde su cultivo hasta su ingesta porque aportan calcio, fibra y antioxidantes al mismo tiempo.
Pero el optimismo, la fe, la confianza y las relaciones familiares y sociales incluso son fundamentales para que muchos de los habitantes lleguen a viejos. Tienen poco, la vida cotidiana es dura y es obligación trabajar mucho para poder yantar. Pero creen que no necesitan más de lo que tienen para comportarse.
Isla de Icaria, Grecia
«Uno de cada tres icariotes llega a los 90 abriles y tienden a comportarse 10 abriles más que el resto de los habitantes de Europa y América», afirma el Centro Internacional sobre el Envejecimiento. Esta isla mediterránea es paradisíaca: posee un clima agradable, el agua como meta, huertas naturales y siestas a diario. La geogonia hace que los desplazamientos requieran de un estado físico apto, por lo que los isleños se ejercitan de forma cotidiana sin notarlo.
Pero al maravilloso animación se le suma una viandas concorde. La dieta habitual de los lugareños es similar a la mediterránea: alimentos básicos como grasa de oliva, caldo tinto, pescado, infusiones de hierbas, miel no pasteurizada, garbanzos, guisantes, lentejas y cantidades limitadas de carne, azúcar y productos lácteos. Se benefician con un pequeño índice de enfermedades cardíacas y una mejor lozanía mental.
Montículo Linda, California
La mayoría de las Zonas azules son islas o penínsulas. Montículo Linda no lo es, pero funciona como tal. Este pequeño pueblo, incomunicación por la equivocación de contacto con otras costumbres, es el hogar de aproximadamente 9 mil seguidores de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
Los lugareños le dan una importancia fundamental a la fe y a sus creencias religiosas, y aquí parece estar una de las claves de su perdurabilidad. Suelen comportarse hasta diez abriles más que los otros habitantes de California. Pero incluso su estilo de vida incluye seguir una dieta vegetariana evitando alimentos «bíblicos».
No consumen asqueroso ni carnes rojas, y siquiera pueden fumar, tomar café, ni succionar bebida. Su dieta incluye granos integrales, mucha agua, nueces, verduras, frutas frescas y legumbres. Se cree que la rutina de reunirse con otros seguidores de su iglesia favorece la socialización, alivia el estrés y refuerza el estilo de vida saludable.
Barbagia, Cerdeña
«En casi todo el mundo, por cada hombre que llega a los 100 abriles hay cinco mujeres que alcanzan esa etapa, aquí la proporción es de uno a uno» aseguró Dan Buettner, autor del volumen The Blue Zones. Queda claro, en este circunstancia los hombres viven más que en cualquier otro flanco.
Es que, en esta maravillosa isla italiana muchos han trabajado como pastores o granjeros y en la ahora se mantienen activos caminando varios kilómetros a diario, el entrenamiento físico ayuda a surtir las articulaciones y el sistema cardiovascular damisela.
Todavía los mayores son muy respetados y forman parte animoso de su comunidad. La expectativa de contribuir a la sociedad los mantiene activos. Un estudio de la Universidad de Cagliari determinó que su involucramiento es más detención que en el resto de las comunas. Son fuente de consulta permanente y ayudan en la transmisión de títulos, de la historia y de la tradición almacén.
Pero incluso la viandas tiene mucho que ver. En su día a día no puede humillar la caucho de chiva (reduce el colesterol y es rica en calcio), la cebada molida, el hinojo (detención en fibra y diurético) y la infusión de cardo mariano (antioxidante y antiinflamatorio). Encima consumen berenjenas, tomates y habas, entre otros productos, de sus huertas propias y beben diariamente su caldo almacén (esmerado con uvas Cannonau) que es rico en polifenoles y inclinado para la lozanía del corazón.